Dirigido a todos los profesionales que además de especializarse en los factores técnicos, deseen desarrollar las habilidades interpersonales y emocionales que influyen en el éxito de un proyecto, especialmente en el ámbito de la investigación clínica, tanto si desarrollan su actividad en laboratorios farmacéuticos, CROs, como hospitales o centros de investigación.
Cada vez resulta más patente la necesidad de acercar a la sociedad los métodos y avances científicos. ¿Cómo despertar y mantener la fascinación por la ciencia sin renunciar al rigor? ¿Cómo enfocar y presentar los contenidos para que sean escuchados y comprendidos?
Estudiaremos enfoques y recursos para ofrecer información veraz y atractiva a un tiempo, analizaremos aciertos y desaciertos a partir de ejemplos reales y aplicaremos la teoría a ejercicios prácticos. Objetivos: • Formular mensajes claros, pertinentes y atractivos. • Realizar presentaciones tan entretenidas como informativas. • Incorporar el storytelling como elemento esencial de la divulgación. Contenido: • Lo primero: el público. Buscar la cercanía. • Técnicas de storytelling para un mensaje comprensible y atractivo. • El diseño gráfico. Cómo convertirlo en aliado. • Ejemplos para seguir y para evitar. DIRIGIDO A: Personas del entorno científico (investigadores, estudiantes, emprendedores, gestores…) que deseen establecer puentes de comunicación con la sociedad en su conjunto. FORMADORA: Pilar Gil Villar se dedica al mundo de la comunicación desde sus diversas actividades como periodista, traductora, asesora de emprendendor@s y apasionada del teatro. Ha publicado en El País, la web de política internacional Esglobal y, sobre todo la revista QUO. Como redactora de ciencia y salud, propuso y elaboró durante más de dos décadas reportajes y entrevistas sobre temas de actualidad en investigación, desde la astronomía o la paleontología a innovaciones biotecnológicas y sus implicaciones bioéticas. Hoy asesora a startups en Telefónica, es profesora de habilidades de comunicación en ISDI y ESCP Europe y la Universidad Complutense, entre otras colaboraciones. Gracias a su experiencia en estos campos, aborda la divulgación como un acto comunicativo cuya gran variedad de herramientas puede aprenderse e incorporarse
Durante los días 6 y 7 de octubre de 2022, ha tenido lugar en Santander el VI Congreso Nacional de Emprendedores Científicos. Organizado por la Fundación Damián Rodriguez Olivares (Fundación DRO) con el apoyo de CISE (Centro Internacional Santander Emprendimiento).
El Presidente de Cantabria, D. Miguel Ángel Revilla, acudió a la inauguración, dando respaldo a esta iniciativa. Ha afirmado que la futura Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación blindará el compromiso de Cantabria con la investigación y el emprendimiento, y garantizará la estabilidad a los profesionales de un campo que, en su opinión, “es la actualidad y el futuro”. El presidente ha reflexionado sobre la importancia capital del emprendimiento y del rigor científico en contraposición con la situación de incertidumbre que existe actualmente en el mundo.
Durante estos dos días, más de 30 ponentes han presentado sus experiencias relacionadas con el emprendimiento científico en todos los ámbitos, tanto desde la perspectiva del investigador académico, que ha iniciado un nuevo proyecto empresarial, hasta la perspectiva de los inversores especializados en innovación.
Más de 120 congresistas han participado en estas jornadas, con una altísima participación e interacción entre ponentes y asistentes.
El primer congreso tuvo lugar en Valencia, hace 10 años, en noviembre de 2012. Desde entonces, este congreso se ha celebrado en Granada, en Barcelona, y en Madrid (dos ediciones del congreso).
El promotor de estos congresos, el profesor Manuel Pérez Alonso, emprendedor múltiple en el campo de la genética, en su charla inaugural hacía referencia al perfil psicológico de los científicos emprendedores: “somos unos locos soñadores, que pretendemos cambiar el mundo. Locos por emprendedores y soñadores por científicos”.
En un momento en los que no nos faltan retos, el hecho de que científicos de toda España se reúnan para crear y desarrollar nuevos proyectos empresariales es una excelente noticia. Es necesario dar a conocer la visión de que una ciencia que soluciona problemas reales y que genera innovación que repercute en la sociedad, es vital para el desarrollo de la misma.
En el congreso se puso de manifiesto cuál es la realidad de la ciencia en España. Todavía queda mucho recorrido para correlacionar la buena posición que ocupa España en el ámbito científico (publicaciones en revistas de alto impacto) y la posición tan baja en el índice de innovación. Es preciso replantearse el sistema de fomento de la innovación, tratándola de forma diferente a la Investigación y Desarrollo, ya que son dos ámbitos muy distintos y necesitan incentivos y mecanismos distintos.
Los retos y obstáculos son casi infinitos, pero el premio es mayor aún: conseguir mejorar nuestra economía, posicionarnos a nivel mundial como referentes en I+D+i y ayudar a las personas a resolver sus problemas. De esta manera, cuantas más empresas de base científico tecnológica existan, más conocimiento se genera, porque no hay que olvidar que dónde más científicos hay trabajando es en las empresas.
“La universidad y la empresa aún no se besan, pero hace tiempo que van de la mano” comentaba Senén Barro, director de CiTius (Centro Singular de Investigación en Tecnologías Inteligentes at Universidad de Santiago de Compostela.) Es fundamental que entre todos los agentes del ecosistema de la I+D+i (inversores, consultores, mentores, poderes públicos, etc.) ayuden a estos «locos soñadores” a llevar sus proyectos y empresas a buen término. No hay que olvidar que este tipo de iniciativas emprendedoras consumen muchos recursos económicos, mucho tiempo y que genera mucha incertidumbre.
De cara a aquellos investigadores que quieren dar el salto a emprender, se tiene que tener en cuenta que es fundamental tener un equipo multidisciplinar, competente, donde cada miembro aporte valor. Por otro lado, fijar un objetivo y tener claro que lo quieres alcanzar, así como encontrar una necesidad no cubierta y conocer lo que el usuario necesita.
Para terminar, como ha comentado un asistente al congreso “La posibilidad de emprender desde el mundo científico es como una aventura llena de peligros bajo un cielo de tormenta y este congreso arroja un rayo de luz y de esperanza”. Por ello, seguiremos organizando el congreso, implicando a instituciones, emprendedores, gestores… para poder seguir impulsando la ciencia y su transferencia a la sociedad.